Luminosas y más sostenibles

Desde hace más de 50 años, Petzl es el líder de la linterna frontal y permite a todos los amantes del outdoor vivir experiencias únicas de día y de noche, en las entrañas de la tierra o en las crestas de las montañas. Pero hoy se presenta ante nosotros un importante reto: construir un futuro sostenible. Reducir nuestras emisiones de CO2 y nuestros residuos, reutilizar y revalorizar son también asuntos esenciales de los que debemos ocuparnos. El camino, largo y complejo, comenzó por la optimización de nuestros productos. Los embalajes de nuestras linternas frontales, responsables del 71 % de los plásticos en los embalajes de los productos, se han rediseñado para integrar materiales con menor impacto.

Permitir que las generaciones futuras sigan disfrutando de la naturaleza

Quien vive la experiencia de una salida nocturna por la montaña, una noche en familia en la tienda o un café bajo la luz de la frontal al amanecer, ya ha escuchado las vibraciones de la naturaleza y sabe admirar sus tesoros.

Conocemos el outdoor y queremos transmitir esta pasión por las actividades al aire libre a las generaciones futuras, sin comprometerlas. Para ello buscamos equipos eficientes, adaptados y sostenibles y cuyo impacto en el planeta podamos controlar.

Como fabricante, Petzl presta cada vez mayor atención a esos desafíos y está comprometido desde hace varios años en el camino de la sostenibilidad desde varios puntos significativos: reducción de su intensidad de carbono*, reducción drástica y valorización de sus residuos y acompañamiento de sus colaboradores en esta iniciativa. 

Brillar con sostenibilidad

Pionera de la iluminación portátil desde hace más de 50 años, Petzl ha permitido abrir el acceso a numerosos terrenos de aventuras y exploración. La marca, fiel a ese espíritu innovador de siempre, trata de repensar un cierto número de procesos para limitar su impacto y proteger mejor el entorno en el cual lleva a cabo sus actividades.

Para reducir sus emisiones de carbono y sus residuos, Petzl trabaja 3 aspectos: el ecodiseño, la elección de materiales más sostenibles y de su suministro y la optimización del uso de sus productos.

En el caso de las linternas frontales, esto se traduce en acciones muy concretas:

• Petzl integra, por ejemplo, tejido reciclado en la fabricación de sus cintas para reducir el impacto del poliéster;
• 9 de cada 10 linternas Petzl vendidas son compatibles con baterías recargables;
• las linternas tienen una garantía de 5 años y Petzl ofrece un servicio de reparación, siguiendo una lógica de prolongación de la vida útil de sus productos;
• para terminar, Petzl ha trabajado en la reducción drástica del plástico que utiliza para los embalajes de sus linternas.

Objetivo cero plástico

A escala de la empresa, Petzl aspira a suprimir totalmente el uso de plásticos de un solo uso de aquí a 2025. Los embalajes de productos no reutilizables, que representan 79 toneladas de plásticos, han sido los primeros en formar parte de esta iniciativa comprometida, y en particular los embalajes de las linternas frontales que representaban, ellos solos, 56 toneladas.

Los embalajes de la gama TIKKA suponían más del 50 % del consumo de plástico anual de todos los embalajes.
Se ha dado prioridad al ecodiseño de su nuevo embalaje y se necesitaron varios meses para analizar las necesidades de nuestros puntos de venta y de nuestros clientes, que buscan una linterna frontal nueva, y para modificar nuestros procedimientos de fabricación en consecuencia.

Al ser robusta y transparente, no es tan simple eliminar el plástico que introdujimos en todas partes hace unas décadas. Los usuarios que buscan una nueva linterna frontal deben poder comprender rápidamente el producto que tienen ante sí. Sin la transparencia del plástico, tuvimos que anticipar cómo hacer aparecer de forma clara el aspecto y funcionalidades de la linterna. De la misma forma, el nuevo embalaje debía garantizar la misma robustez y sujeción que el plástico para proteger el producto.

Tras un año de trabajo, llegaron nuestros nuevos embalajes de cartón que permiten reducir drásticamente el plástico. Solo en la categoría de las linternas, hemos pasado de 56 a 4 toneladas, lo que representa una disminución del 93 %.
Los equipos implicados en el proceso de optimización están orgullosos del camino recorrido. Para ellos es importante continuar con la iniciativa y se están estudiando soluciones para eliminar las 4 toneladas que quedan.

Y como una imagen vale más que mil palabras, este es el anterior embalaje de plástico de una linterna TIKKA y el nuevo de cartón.

* La intensidad de carbón es la relación entre las emisiones de C2 de la empresa y su cifra de negocio (su producción)