El Meru junto a Mathieu Maynadier

Mathieu Maynadier, alpinista y escalador del team Petzl, nos cuenta cómo fue la ascensión del Meru, la cima del Himalaya. Al abrir Gold Fish (800 m, M6+, A1), acaba de firmar una nueva ascensión que supone un hito en su carrera. Relato de su éxito, compartido con Roger Schaeli y Simon Gietl, un equipo en simbiosis.

Mathieu, un atleta con los pies en la tierra... Y la cabeza en las cimas

¿Con qué se queda del Meru? Los largos increíbles y un equipo dinámico.

"La ascensión del Meru era un poco particular porque, objetivamente, había muy pocos peligros. Disfrutamos de los largos más técnicos, pero no eran peligrosos. ¡Son los mejores que he podido hacer en una expedición! 

Las expediciones suelen funcionar gracias a la fuerza mental. Por la incomodidad, las expectativas y las condiciones a veces extremas, es muy importante elegir bien al equipo. Del Meru, me quedo con que estábamos muy sintonizados. Es muy importante compartir los mismos valores y expectativas porque facilita las cosas. Hubo mucho respeto y nada de competición o de ego. Si esta expedición ha sido un éxito es también gracias a eso. ¡Ya estamos planeando futuros proyectos juntos!."

Nueva línea en la cara sur del Meru sur (6 660 m)

Tras un primer intento en el otoño de 2019, cuando Mathieu Maynadier, Sean Villanueva y Roger Schaeli tuvieron que retroceder en el último tercio de la cara, los alpinistas decidieron intentarlo de nuevo la primavera pasada. Mathieu y Roger, esta vez acompañados por Simon Gietl, alcanzaron por fin la cima tras una larga ascensión bastante impresionante. Regreso a una expedición única.

Una ascensión complicada hasta el pie de la pared

20 largas horas de ascensión

Los alpinistas salieron a las 3 de la mañana y acabaron a las 11 de la noche, con las linternas frontales en la cabeza. Encontraron una cornisa con una acumulación de nieve espectacular en la que instalar la tienda para dos personas, al pie del último paso clave.

Últimos largos antes de llegar a la cima