Un día en altura con Cintia, una profesional de los trabajos verticales
Cintia es profesional brasileña de trabajos verticales por cuenta propia. Su pasión por la técnica la ha llevado a participar en varias competiciones internacionales de profesionales en trabajos de acceso por cuerda. Como mujer en una profesión predominantemente masculina, también se implica para ayudar a las mujeres a tener confianza en sí mismas y a llevar a cabo sus sueños.
19 Junio 2020
Acceso mediante cuerda y espacios confinados
¿Tu nombre?
Cintia
¿Nacionalidad?
Brasileña
¿Cuál es tu profesión, experiencia y qué quieres contarnos sobre lo que más te apasiona o motiva?
Soy emprendedora y directora de proyectos de trabajos en altura. Mi pasión empezó en 2002 cuando empecé a escalar. En 2012, seguí una competición internacional en la que participaba una rusa que dominaba mucho la técnica y era muy eficaz en sus maniobras. Me inspiró muchísimo. Así se convirtió en un sueño para mí: participar en una competición internacional de profesionales de acceso por cuerda. Creamos un equipo. En 2018, después de una gran inversión personal y de entrenamiento con mis compañeros Eudardo y Tiago, finalmente conseguimos este sueño. Mi otra gran pasión, además del oficio de técnica de trabajos verticales, es motivar a las mujeres a luchar para alcanzar sus objetivos, a no abandonar. A veces, el camino es difícil y muchos dirán lo que es posible o no lo es, pero no hay que escucharles. Sólo las propias mujeres pueden saber lo que son capaces de hacer.
¿Puedes presentarnos la empresa?
Nuestra empresa es Axis Serviços em Altura LTDA, en Brasil. Estamos especializados en soluciones integradas para los trabajos en altura. Proponemos soluciones para los trabajos que requieren accesos por cuerda, pero también formación, sistemas de anclajes, así como la inspección de los EPI (Equipos de Protección Individual). Axis tiene sus raíces en la escalada y el alpinismo.
¿Cuál es el objetivo a alcanzar en los proyectos?
En nuestros proyectos, instalamos accesos por cuerda para realizar maniobras técnicas en lugares de difícil acceso.
¿Cuáles son las medidas o técnicas que utilizáis?
Utilizamos técnicas de acceso por cuerda, rescate, escalada, poda, realizadas por técnicos experimentados.
¿Cuáles son los puntos específicos, los desafíos y las dificultades?
Como nos encanta la técnica, los equipos y las formaciones, intentamos siempre realizar nuestras maniobras lo mejor posible, más rápido y con la máxima seguridad. Uno de los problemas de nuestro país es que mucha gente no se toma en serio las profesiones de accesos difíciles, por lo que hay un bajo nivel de profesionalidad.
Entre las dificultades que nos encontramos, tengo que afrontar ciertos prejuicios por ser mujer. Tengo que estar demostrando continuamente que soy capaz de hacer lo mismo (incluso mejor) que cualquier hombre. Es uno de los grandes desafíos de mi vida cotidiana.
¿Cuáles son los puntos fuertes de vuestro proyecto?
Por un lado, ser mujer realizando esta actividad en lugares de difícil acceso no pasa desapercibido y diferencia a nuestro equipo de los demás. Creo también que el hecho de participar en competiciones, siempre nos aporta conocimientos técnicos a aplicar más tarde en proyectos complejos.
¿Cómo es tu día a día en esta profesión?
Llego al despacho, planifico y organizo la jornada de trabajo del equipo, siempre imaginando la mejor opción para asegurar la eficacia economizando la energía y asegurando un máximo nivel de seguridad para el equipo. Los motivo para que la jornada salga perfecta. Como los tipos de proyectos y los lugares de trabajo son muy variados, cada día es diferente. Algunos días, estamos fuera para limpiar cristales, dar formaciones o incluso hacer inspecciones. Otros días, estamos en teatros para ayudar a los artistas con sus espectáculos. Trabajar para Axis me motiva todos los días gracias a esta diversidad de misiones.
¿Nos puedes explicar alguna anécdota divertida o experiencia personal que destaques?
Un día, tuve una experiencia que me conmovió mucho. Mi marido y yo fuimos a instalar carteles en un centro comercial. La persona responsable de la recepción del servicio al principio no nos aceptó, pensaba que no podríamos solos nosotros dos realizar la tarea que nos habían encomendado, que necesitaríamos hombres más fuertes. Ella continuaba diciendo que se requerían cuatro hombres para poderlo hacer. Tuvimos que argumentar mucho, explicar todo el procedimiento, mostrar nuestro material y las técnicas que íbamos a utilizar. Después de un cierto tiempo de discusión, nos dio el cartel diciendo que ella misma seguiría la ejecución del trabajo, ya que todavía dudaba de nuestras capacidades. Me encanta el desafío, demostrar que soy capaz. Pero esa vez siento que duele más por ser una mujer como yo, y por ser una mujer que juzga que soy débil.
News relacionadas