Viajar, escalada pasión: relatos de tres atletas. EP3: Mümin Karabas
El Petzl RocTrip 2014 estuvo en ruta durante los pasados septiembre y octubre con el objetivo de explorar las diferentes posibilidades y estilos de escalada en Europa del Este. A través de los relatos de Klemen Bečan, Philippe Ribière y Mümin Karabas, descubrirás cómo estos atletas del Team Petzl convierten su pasión en un auténtico viaje.
13 Abril 2015
Escalada en rocódromo y en pared
Mumin Karabas, vías de escalada para escribir su historia
Recorrer el mundo es una forma de viajar, pero para Mümin Karabas, la escalada es otro viaje en sí mismo, porque es capaz de conformar una historia. En esta entrevista, Mümin nos explica cómo viaja simplemente escalando.
¿Cuál fue tu último viaje de escalada?
He viajado mucho gracias a la escalada, pero también me he concentrado en las diferentes regiones de Turquía para desarrollar esta actividad. Mi último destino fue Antalya, en el sur de Turquía. Un lugar magnífico donde el sol brilla incluso en invierno y donde es fácil combinar escalada y baños.
¿Cómo escoges tus destinos?
Acostumbro a escoger mis destinos en función de la meteorología :) Pero por supuesto, algunos lugares me inspiran más que otros por sus enormes posibilidades de escalada. Me gusta descubrir nuevos lugares, siempre es más divertido y, para esto, el boca a oreja es el mejor medio de hacer bonitos descubrimientos. No siempre es fácil evaluar el potencial de un lugar. A veces, pasas varias horas buscando sin encontrar nada interesante, después, a veces te encuentras con rincones paradisíacos. Nunca puedes saber con antelación lo que descubrirás.
¿Qué tipo de escalada prefieres?
Prefiero la escalada deportiva porque es lo que tengo más accesible cerca de casa. Aunque también hay potencial de grandes itinerarios y toco un poco este aspecto de la disciplina. También he probado el bloque, pero muy poco; es más para compartir un buen rato con un gran grupo de amigos, por esto la escalada en bloque es divertida.
¿Cómo te preparas para viajar?
¡Buf ! Me encanta viajar y me encanta equipar nuevas vías cuando viajo, ¡también me lo paso en grande preparando todas mis bolsas! Una bolsa para el «maquillaje» (no, ¡esto es sólo una broma!), pero sí que me llevo una gran bolsa con ropa, otra para la vestimenta de escalada, una más para el material para equipar y una última para el material de escalada… ¡Y también no me olvido de una bolsa de emergencia! Son muchas cosas que tengo que preparar y, a la vez, lo que me indica que empieza la aventura… aunque también me gusta ese momento en el que piensas en cada cosa, invades el salón para comprobarlo todo. Ocurre lo mismo a la vuelta. Lo sacas todo (¡¡por supuesto en el salón!!) para organizar el material! Te trae buenos recuerdos, cuando estás limpiando tu material, te acuerdas del momento que pasaste en la pared: es una buena sensación que te llena el corazón. Por supuesto siempre acabas olvidando algo… ¡y, a veces, son las brocas del taladro!
¿Y qué haces cuando te olvidas algo importante?
¡Siempre llevo una bolsa de "emergencia"! Intento organizarme para no olvidarme nada, en concreto para el material de equipamiento, pero a veces, uno no ve las pequeñas cosas más importantes como las brocas del taladro, las llaves… Por experiencia, preparo una bolsa de emergencia para las herramientas, porque no tienes muchas opciones lejos de casa. Y en esos casos, te dices, "ok, hoy no equipo! ¡¡Ya volveré mañana!!". Para el material de escalada, siempre te puedes espabilar para encontrar cintas exprés, un arnés o pies de gato… pero es más difícil para las herramientas. De todas formas, lo mejor siempre es no olvidarte nada. Soy un poco soñador a veces, cuando preparo mi material. Me imagino la vía, sueño con ese paraíso de roca, pero si te olvidas de algún elemento tu sueño se evapora.
¿Siempre equipas nuevas vías cuando viajas?
Sí, la mayoría de las veces. Es mi objetivo. Voy a muchos lugares nuevos a escalar. Intento acompañar a la gente local para desarrollar su zona y promover la escalada equipando y preparando guías, artículos… Me siento satisfecho cuando vuelvo a estos lugares y veo que se han equipado unas cincuenta vías más. Es genial reencontrarse de nuevo para escalar juntos, es una gran motivación para todos. Es la mejor forma de desarrollar la actividad localmente y hacer buenas relaciones. Después de esta fase de equipamiento, a veces, la gente local propone festivales en torno a la escalada. Esta actividad está avanzando mucho aquí.
¿Qué es lo que te gusta al equipar una nueva vía?
Equipar representa un trabajo enorme. Debes limpiar la vía, perforar la roca para colocar los seguros, hacer pruebas… El material es pesado.
Cuando escalo una vía que no está equipada, el proyecto me absorbe completamente y paso más tiempo preparando la vía que escalándola, pero esto es lo que me gusta: preparar la vía, limpiarla e imaginar los movimientos.
Lo peor es cuando llevas días preparando tu vía y en el primer intento, rompes una presa clave. Se debe encontrar una solución diferente para la vía. En todos los casos, ¡esta dinámica te lleva a avanzar, a superarte, a imaginar las cosas de forma diferente! Esto es lo que es emocionante cuando equipas una nueva vía. Desde abajo las cosas te parecen evidentes, ves los pasos difíciles, los encadenamientos, la lógica de la vía, pero cuando te lanzas en el primer intento, de repente todo es menos evidente. Pruebas varias cosas, a veces te ves obligado a romperte los sesos para comprender el movimiento. Pero esto también es lo que construye la historia de la vía, tu aventura con ella y debes estar preparado. Tienes que sentirla. Cuando escalas una vía de esta forma, tienes un buen feeling, es un poco como la primera vez que se pisó la luna. Eres la primera persona en poner los pies y las manos en esa pared y me gustan las vías que requieren toda esta reflexión y trabajo. No me gustaría encadenar las vías en el primer intento; es como comer en un fast food, «¡comes y todo termina! », a mí no me va. Prefiero descubrir nuevas vías que nutran mi espíritu y mi historia. Es el lado creativo y artístico y es un viaje interior hacia sí mismo. Cuando equipas una vía, pones lo mejor de ti. Algunas vías son agresivas, mientras que otras son más cool sin tener que cambiar de nivel. Es una buena forma de expresarse, lo das todo.
¿Cómo le pones el nombre a las vías que abres?
Les pongo siempre un nombre que viene de la historia que tengo con la vía. La mayoría de veces pongo nombres bonitos a estas vías porque he vivido una bella historia con ellas.
«Dream is over» era un gran proyecto cerca de mi casa. Vivía con este sueño de abrir esta vía tan dura. Cuando la terminé, me dije que este sueño se había convertido en realidad.
También he abierto varias vías que forman una continuidad en mi historia. Como Russian Bright que simbolizaba mi relación con mi ex novia, porque era rusa. Y la vía siguiente se llama Russian mafia cuando me dejó. Pero esto no se termina aquí, también hay la Russian roulette y ¡¡para terminar Russian salad!! Cada una de estas vías tiene su propio carácter. El nivel va in crescendo, excepto Russian salad que es una vía fácil, pero esto refleja bien todo lo que pasé durante ese periodo. Cuando escalas Russian Bright que es una de las más fáciles, sueñas con hacer Russian mafia, ¡pero es una gran batalla! Y a continuación, intentas Russian roulette, que es la más dura, es como la ruleta rusa, puedes caer en cualquier momento, es también para disuadirte de jugar otra vez a este juego. Russian Salad cierra este episodio, la vuelta a la calma. Me gusta esta forma de expresión: poder dejarlo todo grabado en la pared.
En el artículo
News relacionadas